La columna de Eugenio Vega: Viudas, huérfanas y otras perversiones tipográficas

Eric Gill murió en 1940, a los cincuenta ocho años de edad, dejando viuda, huérfanas (y huérfano) que superaron aquel trance con la resignación de la fe católica que habían abrazado años atrás. Tras su fallecimiento, fue considerado uno de los referentes del arte, la artesanía y el diseño británicos, un artista admirado…

La columna de Eugenio Vega: De cómo Carlos Estuardo, rey de Inglaterra y Escocia, perdió el amor de su pueblo

Desde que el mundo es mundo las grandes instituciones han hecho del diseño un instrumento para definir su estructura y describir sus funciones. En realidad, “de todos los modos en que puede influir en cómo pensamos, el único que se reconoce sin discusión ha sido su capacidad para expresar…

La columna de Eugenio Vega: De la propiedad intelectual y otras debilidades humanas

No cabe duda de que se ha avanzado mucho con la aprobación de leyes que preservan los derechos de propiedad intelectual frente a las prácticas ilegales de empresas, instituciones y particulares. Sin embargo, en los últimos tiempos se ha abierto un debate sobre la compleja relación entre la preservación de esos derechos y la libertad de expresión.

La columna de Eugenio Vega: Del donoso y grande escrutinio que el cura y el barbero…

“No, (dijo la sobrina) no hay para qué perdonar a ninguno, porque todos han sido los dañadores: mejor será arrojallos por las ventanas al patio y hacer un rimero de ellos y pegarles fuego; y, si no, llevarlos al corral, y allí se hará la hoguera, y no ofenderá el humo” (Cervantes, 1605).

La columna de Eugenio Vega: La ciudad de los prodigios

En el año 2000 (de tan grato recuerdo), Barcelona fue elegida por ELIA, la European League of Institutes of the Arts, para celebrar su décimo aniversario. La asociación, nacida en Ámsterdam en 1990, quiso durante esa conferencia afrontar las perspectivas que se abrían tras la Declaración de Bolonia de 1999 y la Declaración de París de ese mismo años. A tal fin, concluyó sus sesiones con un manifiesto lleno de buenas intenciones.