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Teorética/CR: Edificio Metálico

Para el arte, la arquitectura, el diseño y el pensamiento centroamericano y del Caribe, Teorética reabre su espacio de miradas al acontecer y esos diálogos que como vectores se cruzan en la doble vía del vivir actual. Para febrero/mayo 2012 presenta una muestra curada por Inti Guerrero, su nuevo director artístico, quien, como activador conceptual focaliza el “Edificio Metálico” de San José, en complicidad con un grupo de artistas nacionales e internacionales formado por Francisco Bracci, Neil Beloufa, Gilda Mantilla y Raymond Chávez, La Fania All Star, Dominique Gonzales-Foesrster, Ossama Mohammed, The White Striper y Ramón Zafani.

El título de la propuesta “Edificio Metálico” refiere al espacio arquitectónico que ocupa la escuela Buenaventura Corrales de esta capital, ensamblado en 1896 luego de ser traído de Bélgica en 1892. Pero ni un solo rastro de ese referente cultural y de la educación costarricense está en la muestra, al observador lo recibe un tejido de conceptos cuyas interpretaciones se transparentan entre sí al superponer capas elaboradas a partir de los significados simbólicos del inmueble, localizado en la misma zona central de la ciudad donde se ubica Teorética.

Gilda Mantilla y Raimond Chaves, "Carbon Copy Jungle" – Selva musical II, 2012
15 dibujos, copias al papel carbon. Foto cortesía de Teorética.

La propuesta
El Edificio Metálico es de estilo neoclásico, fabricado como un sistema modular para ser transportado y ensamblado en cualquier sitio; técnica y material que anunciaba ya en aquellos años postreros del siglo XIX la industrialización. Para esa época nuestra capital veía florecer la construcción pública y privada, además ya estaban en uso productos del diseño urbano en hierro forjado tales como rejas, faroles, postes de electrificación, mobiliario para parques, entre otros, gracias a la bonanza de la exportación del café; fueron años en que también se construyó el Teatro Nacional. Para Guerrero, representan la adopción de un paradigma estético por parte de las élites privilegiadas de la sociedad decimonónica, no solo josefina, sino de varios países del mundo que en diversos contextos asumían la experiencia global con profundos sentidos de pertenencia a través de esos símbolos de la modernidad: edificios, monumentos, puentes, el transporte ferroviario, la iluminación de la ciudad, como presencia de los deslumbrantes albores de la Revolución Industrial y el llamado Siglo de las Luces.

La lectura de “Edificio Metálico
Como muchas experiencias de la producción cultural en la sociedad de la (In)formación, mediada por la tecnología, mi lectura de la muestra Edificio Metálico se da en profundidad: cada artista crea un estrato con su propia narrativa, trazos, gestos, poética, que se yuxtaponen o contraponen motivando diálogos con los demás y bordeando al referente principal, invisibilizado. Los conceptos son como hipervínculos para ir por entre esas capas intrincando relaciones, para que de esa manera los observadores nos comportemos como palimpsestos cavando en la historia, la cultura popular, u otras realidades que aluden a situaciones ocurridas en cualquier punto que se quiera señalar en la cartografía mundial.

Gilda Mantilla y Raimond Chaves, "Casa de Fierro", 2011. Diapositiva.Maqueta arquitectónica de fibra de vidrio. Foto cortesía de Teorética.

Yo me pregunto: ¿Qué tiene que ver esa escuela del formidable film de Osamma Mohammend (Lattakiya, Siria, 1954) titulado “Paso a Paso”, 1977, que versa sobre una fuerte experiencia en la vida social, política y religiosa de una zona agrícola Siria, con el día a día escolar de la Buenaventura Corrales (Edificio Metálico) de Costa Rica?
¿Qué centra la fotografía de aquella maqueta de una elegante residencia neoclásica diseñada por Gustave Eiffel en 1889, que emerge de los estuarios amazónicos donde cultivan el gaucho en Brasil?
Las respuestas nos las ofrece la muestra: está en el proceso de la memoria cultural, en el paso a paso que cala en la formación de nuestros niñas y niños en cualquier lugar del mundo delante del poder -en el caso del film. Está en la adopción de ese modelo de vida, gracias a la extracción del gaucho que activa la relación conceptual con la bonanza cafetalera de nuestro país en esas épocas de adquisición de lenguajes y pertenencias a la globalidad. La referencia a la casa metálica documentada entre cientos de símbolos por Gilda Mantilla y Raimond Chaves (Los Ángeles, 1967 y Bogotá, 1968) vincula además el conjunto de los hermosos dibujos “Carbon Copy Jungle”, 2012, que son registros de sus investigaciones sobre los objetos de una visualidad cotidiana en el Amazonas.

Ramón Zafrani, "Sin título", 2008- Maquetas construidas con retazos de madera. Foto cortesía de Teorética.

Dicha “capa” creada por Mantilla y Chaves, se transparenta con la propuesta del artista panameño Ramón Zafani, nacido en 1973, quien expuso un conjunto de maquetas reutilizando trozos de madera provenientes de las casas construidas por los norteamericanos en su país, que luego de su demolición, fueron (trans)formados en modelos arquitectónicos que proyectan el paisaje urbano actual de ciudad de Panamá, juego entre el Estado, el poder neoliberal, y el emporio bancario.

Neil Beloufa, "Kempinski", 2007. Video-instalación. Foto cortesía de Teorética.

Aquellas maquetas de Zafani entablan otro diálogo con la construcción de Neil Beloufa de un modelo de arquitectura informal inserto en el espacio de Teorética con fragmentos de otra realidad, la de muchas barriadas urbanas periféricas donde se construye con materiales de desecho, y se reinventa un mobiliario con sus ventanas o mirillas -para ver o que nos vean-, y por cuyos poros se cuela el signo de la contradicción.

Dominique Gonzalez-Foerster, "Gloria", 2005. Film transferido a DVD, 5min. Foto cortesía de Teorética.

El jardín parisino de Dominique Gonzalez-Foerster, (Strasbourgo, 1965), titulado “Gloria”, 2005, sobre un jardín urbano en cuyo perímetro aparece de nuevo la arquitectura globalizada, y donde la naturaleza tropical invade el mobiliario y estatuería con ese verdor que se expande, propio de la selva brasileña. Esta hermosa imagen del jardín instalada en la muestra en un amplio monitor y que dispone audífonos para escuchar su sonoridad nos vincula con anteriores capas, pero a su vez entabla otro vínculo con la propuesta de Francesco Bracci (San José 1976), quien fragmenta una lámina de metal para abandonarla con cierto lapso de tiempo y en varios puntos de la geografía nacional, para que la misma naturaleza las impacte con sus propias contingencias, que no son las mismas según sea el lugar y las condiciones atmosféricas de cada zona. El abordaje al referente ausente en el caso de Bracci se da a través del material.

Francesco Bracci, "O.I.E.N Objeto", 2011. Láminas de metal expuestas a diferentes estados climáticos. Foto cortesía de Teorética.

En otra zona de la propuesta se corre el video que LA MTV de Brasil produjo en 2005 con un concierto de la banda rockera “The White Stripes” presentado en el Teatro Amazonas, frente a una audiencia masiva que componen parte de esa trama que nos refiere a la cultura popular, que dialoga con el candente concierto de la Fania All-Stars en 1974 en Zaire, África, resuenan como esos diálogos a que nos tienen acostumbrados las intervenciones de artistas y curadores en Teorética.

Que me queda al visitar Edificio Metálico
Apreciar el arte actual es como tratar de interpretar la deriva, se sabe que fluye más nadie tiene certeza de hacia dónde ni cuando lo hará; ese carácter agrega interés en tanto incrementa el desafío y crece la incertidumbre, sobre todo cuando el curador anuda tantas pistas que el observador debe trasladar a su comprensión y lenguaje.
Es una propuesta curatorial y expositiva muy bien articulada, asimilada, construida en el espacio de Teorética con el rigor que los caracteriza; se trata de un “constructo de tensiones interpretativas” que repercuten en lo político, económico, social, cultural, estructuradas para hablar –repito-, del gran ausente en quien todos ponemos las miradas, que, como producto de la cultura contemporánea –y, como se dijo-, anida lo incierto de la cuestión, por lo que hay que preguntarse, bordear la experiencia desde otros estadios y a veces hasta saberse capear la vuelta del objeto-boomerang que representa la obra de arte.
 

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