àPetit, un proyecto de Lamatilde. Nunca 40 m2 fueron mejor aprovechados

àPetit, un proyecto de Lamatilde. Nunca 40 m2 fueron mejor aprovechados

«El toque pop de los festones consiguen insuflar su ambiente festivo y de convivencia al nuevo lenguaje visual».

Lamatilde, el estudio multidisciplinar italiano fundado en 2017 Michele Cafarelli, Luca Macrì, Sandro Rizzo, Marco Ruffino y Silvio Tidu, ha sido el encargado de dar vida a àPetit, un refrescante espacio gastronómico ubicado en Aosta, a los pies de los Alpes italianos.

El reto del equipo creativo de la a cargo de la cuenta era desarrollar desde cero una propuesta —identidad e interiorismo— lo suficientemente potente para exprimir los escasos 40m2 del local y ayudarlo a imponerse en el ecosistema comercial de la zona.

La respuesta llegó y arrasó. Subidos en una paleta de alto contraste pero ciertamente amigable, formas orgánicas y la implementación de materiales nobles y reconocibles como el terrazzo, se consiguió dotar a àPetit de una arrolladora personalidad. «El toque pop de los llamativos festones, como los que decoran las ferias tradicionales de los pueblos, consiguen insuflar su ambiente festivo y de convivencia al nuevo lenguaje visual», comenta Cafarelli.

Por supuesto, el mobiliario merece una nota aparte. Impecable. Orgánicos, ligeros y funcionales, cada pieza cumple en el apartado funcional y estético con creces. «Destaca el mobiliario a medida con la textura orgánica de materiales expresivos como el gres porcelánico, que reviste superficies creando un paralelismo con los productos gastronómicos artesanales de la carta. El mismo material se extiende también al piso, parte de las paredes y mostrador, abrazando el espacio en esta celebración del sabor».

àPetit, un proyecto de Lamatilde. Nunca 40 m2 fueron mejor aprovechados
àPetit, un proyecto de Lamatilde. Nunca 40 m2 fueron mejor aprovechados
àPetit, un proyecto de Lamatilde. Nunca 40 m2 fueron mejor aprovechados
àPetit, un proyecto de Lamatilde. Nunca 40 m2 fueron mejor aprovechados
àPetit, un proyecto de Lamatilde. Nunca 40 m2 fueron mejor aprovechados
àPetit, un proyecto de Lamatilde. Nunca 40 m2 fueron mejor aprovechados
àPetit, un proyecto de Lamatilde. Nunca 40 m2 fueron mejor aprovechados
àPetit, un proyecto de Lamatilde. Nunca 40 m2 fueron mejor aprovechados
àPetit, un proyecto de Lamatilde. Nunca 40 m2 fueron mejor aprovechados
àPetit, un proyecto de Lamatilde. Nunca 40 m2 fueron mejor aprovechados
àPetit, un proyecto de Lamatilde. Nunca 40 m2 fueron mejor aprovechados
àPetit, un proyecto de Lamatilde. Nunca 40 m2 fueron mejor aprovechados
àPetit, un proyecto de Lamatilde. Nunca 40 m2 fueron mejor aprovechados
àPetit, un proyecto de Lamatilde. Nunca 40 m2 fueron mejor aprovechados
àPetit, un proyecto de Lamatilde. Nunca 40 m2 fueron mejor aprovechados
àPetit, un proyecto de Lamatilde. Nunca 40 m2 fueron mejor aprovechados
àPetit, un proyecto de Lamatilde. Nunca 40 m2 fueron mejor aprovechados
àPetit, un proyecto de Lamatilde. Nunca 40 m2 fueron mejor aprovechados

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.